La historia que relata los orígenes de Corghi es una historia sencilla y, en ciertos aspectos, ejemplar.
Es una historia que comienza en el corazón de Emilia, una tierra abierta y vital que desde los albores de la posguerra muestra una gran vocación, todavía presente, por desarrollar empresas de vanguardia, sobre todo, en el campo de la mecánica.
1957 - Reclamo de caza: fonofil
En 1947 los hermanos Erminio y Remo Corghi empiezan a poner en práctica sus habilidades empresariales y su ingenio construyendo equipos de radio e inventando un reclamo especial de caza con grabadora de cable. Seis años más tarde, en 1954, nace Corghi Elettromeccanica. La marca con el ruiseñor, que a partir de ese momento se convirtió en el símbolo de la empresa, empieza a ser apreciada.
La empresa desarrolla su saber hacer mecánico en un amplio sector: estabilizadores de tensión para la TV, máquinas agrícolas, electrodomésticos, maquinaria textil.
Durante estos años las ideas florecen y se desarrollan sin esperar a que se presente la “Ocasión”.
En 1960, cuando estalla el boom del automóvil, los hermanos Corghi están perfectamente preparados. Inventan y patentan la primera desmontadora de neumáticos del mundo. Se trata del “artiglio”, la garra que necesitaban para entrar con fuerza en el mercado. La empresa despega y jamás deja de volar alto.
Hoy en día Corghi es líder indiscutible del mercado italiano, y líder mundial, del sector de los equipos para la asistencia a vehículos.